miércoles, 16 de diciembre de 2015

Yo no voto, poto

           
"¿que consulta electoral pondrá fin a la desintegración urbana y rural, a la miseria psicologica y cultural, a la manipulación mediática de las masas solitarias, a la explotación  cada vez más brutal de la mano de obra, al éxodo y al desarraigo mundial de los individuos, a la falsificación industrial del aire que respiramos, del agua que bebemos y de los alimentos que ingerimos?"
Alèssi Dell´Umbria

        En época de elecciones siempre pasa lo mismo, se repiten los mismos argumentos y las mismas situaciones. Los políticos se acuerdan de los que están abajo y bajan desde sus poltronas, más que para escuchar para que les escuchen. Sus expertos en manipulación de masas les dejan sus programas políticos bien preparados para que sepan aquello que tienen que hacer o decir para conseguir más votos. Las mismas agencias que crean anuncios publicitarios trabajan en las campañas políticas. Todo forma parte de la sociedad de la imagen, aquella a la que nos postramos todos los días delante del televisor.

Cada año es más evidente el espectáculo que interpretan, en el que las ideas son lo de menos, es la imagen y el talante mediático de cada uno de los candidatos lo que cuenta. Lo vemos en los indecisos que dudan si votar a formaciones que, en teoría, son completamente antagónicas. La gente se deja manipular por los medios de una manera alarmante. Estos son capaces de hundir o alzar a un partido o a una idea según sus intereses en tiempos cada vez más reducidos. Ejemplos sobran. Votar se ha convertido en una nueva forma de consumo. Eliges entre aquel producto que servirá mejor a tus intereses individuales. La política se ha convertido en un producto que compras cada vez que los comerciantes de la política deciden mercadear. Es un espectáculo que ha llegado al grado cero del pensamiento. Cada vez mayor numero de personas depositan su voto a aquel candidato que más sale por la pantalla y que más apoyo recibe por los periodistas al servicio de los grandes medios de comunicación. 

Han conseguido con sus nuevos partidos, tanto por la izquierda como por la derecha, anular aquella deslegitimacion y aquel desencanto que se estaba produciendo hacia el sistema partitocratico que se había producido desde el comienzo de la crisis. Hoy todos votan con ilusión y sus esperanzas están puestas en sus gobernantes más que en las protestas que pudieran producirse. El Capitalismo con cada crisis sale reforzado. 

Han convertido las lecciones y al sistema de partidos en el único modo de participar en política, cuando en realidad aceptar la partitocracia nos impide cuestionar el sistema, nos divide y nos entretiene en cosas que nunca llegan a la raíz de los problemas. Ya no hay oposición de colectivos fuertes, organizados desde abajo, verdaderamente democráticos, en donde la base decida y presione a los gobernantes. Ahora todo es organizar partidos jerárquicos para neutralizar a las personas y a las protestas.

También tenemos los típicos "demócratas" que cada vez que hay elecciones se vuelven personas interesadas por la política y deciden hacer campaña tanto a nivel individual como en colectivo. Son personas que se indignan tanto con sus adversarios políticos pero sobretodo con los abstencionistas activos ya que no comprenden que haya gente que haya llegado a la conclusión de que cambiar de amo no sirve de nada.

Mientras temas importantísimos, que nos afectan y afectaran a todos, son silenciados. La información es elegida conforme a los intereses de las clases dominantes para que no seamos capaces de pensar en aquellas cosas que son verdaderamente importantes. Hemos delegado nuestra capacidad de pensar, de debatir y de actuar a los periodistas y manipuladores de masas, a los platós de televisión y a los políticos. La ignorancia por asuntos que debemos de solucionar por nosotros mismos va en aumento. La papeleta que se deposita en la urna es una delegación que hace el individuo de poder pensar, organizarse con sus iguales y decidir democráticamente la vida que le gustaría vivir. Nos han hecho creer que todo se arregla mediante decisiones gubernamentales cuando es día a día mediante actos autónomos y colectivos como hay que hacerlo. Las alternativas son difíciles y están por construir pero solo será mediante el esfuerzo de cada uno de nosotros como podrán llevarse a cabo. No somos políticos que prometen cosas fáciles mientras los demás no hacen nada.

El proximo 20 de Diciembre no votaré ya que como dijo Emma Goldman "Si votar sirviera para cambiar algo, estaría prohibido".

Santiago Fernández

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hoy estamos de huelga !NO VOTO!