Los gobiernos toman de sus artimañas como las auditorias para mostrar su lavado de cara a la vista de las personas que confían en las estrategias político-judiciales. Son la herramienta de moda de las instituciones, al igual que las web de trasparencia, de los nuevos movimientos políticos y sociales que surgieron tras el 15M. Decir que no son eficientes es por que desde dicha fecha hasta hoy, se han realizado varias auditorias en diferentes gobiernos y nada ha mejorado. Se trata de una artimaña ciudadanista para justificar y seguir manteniendo el control y el poder. Mediante la propaganda invasiva consiguen esa limpieza de imagen haciéndonos creer que existe una forma diferente de ejercer el poder sin dominación, unos cuantos culpables y encarcelados y la sociedad quedará tranquila.
Viniéndonos a nuestra zona, el gobierno del ayuntamiento de Segorbe ha pedido una auditoria urbanística a sus tecnócratas, in-dependientes y amigos, para contentar a su electorado y pretender dejar las cuentas claras, para cuando termine su legislatura tener sus balances cuadrados y no ser culpados de desfases de otros gobiernos. En el periódico “Puente Nuevo” en su sección de opinión, cada uno de los cuatro partidos ha relatado su visión de la auditoria urbanística como mejor nos la pueden vender, ninguno nos ha desvelado nada nuevo y la crítica olvida y deja de lado una cuestión fundamental como es la destrucción de nuestro territorio.
El bipartito segorbino defiende los intereses del enemigo pese a que ellos lo achaquen al anterior gobierno de la herencia envenenada. Ellos son los que han firmado los precios del agua con la empresa y pese a que aleguen que ya estaban pactados, nada se hubiera podido hacer sin su firma. No han tomado ni siquiera una medida para dificultar a la empresa y existían muchas formas de hacerlo, por lo tanto se han convertido en sus amiguetes. Y por lo tanto en nuestros enemigos.
Firmado: Un vecino con ganas de juntarse contra la empresa.
1 comentario:
De puta madre!.
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