lunes, 19 de septiembre de 2016

Cultivos de maiz cercanos a Segorbe son arrasados por jabalíes.

Resultado de imagen de jabalies cruzando la carretera
Estos días pasados los agricultores de Segorbe denunciaron los destrozos en sus  plantaciones de maíz causados por jabalíes, en partidas cercanas a la localidad. [1] En esta ocasión los malhechores son los jabalíes en otras han sido los conejos o las cabras montesas. Son animales que viven en su propio entorno  del que están siendo desplazados por la mano del hombre y por la constitución de infraestructuras ferroviarias, carreteras, autopistas, urbanizaciones, tendidos de 
antenas… que desbastan sus lugares de paso y vivencia, arrasando el  hábitat donde desarrollan su vida. 


Atribuir la escasez de alimentos y a la sequía, a los incendios forestales...como las únicas causas de esta problemática es faltar a la verdad, ya que estos dos elementos son resultado del sistema capitalista en el que estamos envueltos, el cual le da valor al consumo de mercancía y materia prima olvidando el medio ambiente que la suministra, no teniendo en cuenta que la despensa es  finita. Como dicen los compañeros de la revista Argelaga “el territorio, libre de agricultores, es reordenado según las nuevas necesidades de la economía”.

Observando los itinerarios que hacen los animales, vemos que su entorno es destrozado y eliminado por infraestructuras enclavadas en el territorio. Estas son obstáculos, como si fueran grandes vallas que rompen sus vías de paso, cañadas y sendas por lo que los animales, desorientados, deben buscarse la vida en otro lugar. Cuando estas huidas no cesan y son acompañadas de falta alimento, los animales ya no temen al hombre y discretamente se acercan a comer donde tienen comida, en zonas cercanas a los pueblos o en ellos mismos. Otra causa que acrecenta el problema es la eliminación de zonas naturales,  por la construcción de urbanizaciones, chalets o adosados edificados al capricho, en las laderas de las montañas donde eliminan la naturaleza por suelo asfaltado. Todo ello elimina el hábitat y lo agota.

La  política de la administración en la gestión del medio ambiente siempre es la misma independientemente quien gobierne, tanto izquierda como derecha, terminan engrandeciendo el Estado y las fuerzas policiales, creando nuevos especialistas y financiando empresas público/ privadas. El último ejemplo es la propuesta del gobierno valenciano de Puig al anunciar la creación de un grupo en la policía autonómica para investigar incendios[2]. En otras ocasiones los gestores locales lo resuelven tajantemente mediante la muerte de los animales en batidas de jabalíes o conejos [3], que son sufragadas por los ayuntamientos de los pueblos afectados, dando muerte a los animales en cuestión, al volverse insostenible la situación y no ver que el problema es bastante más profundo. Y si a los científicos se les ocurre intervenir los resultados pueden tener consecuencias generacionales y dramáticas, como el caso del médico francés Armand Delille  que “creyó” encontrar la solución al introducir artificialmente en Francia unos cuantos conejos inoculados con el virus productor de la mixomatosis [4] . Elimino de un plumazo el  90% de los conejos de la península, Australia y  Francia, enfermedad que aun padecen los conejos y esta dispersada por el medio ambiente. Esperemos que a ningún iluminado se le ocurra buscar las soluciones en los laboratorios.
  
Nuestro gran desafío es realizar un cambio profundo en el uso del territorio, devolviéndole el sentido que tenía, y volviendo a instaurar la lógica en la interacción de las personas con el medio.

Alfonso G. Soler     Colaborador del Eco del Palancia

1 comentario:

Santiago Fernández dijo...

Muy buen articulo Alfonso. Lo que están haciendo es una domesticación de la naturaleza total, o lo que es lo mismo acabar con ella. Lo llevamos viendo muchos años. Cada ataque a un cultivo o a un rebaño es una excusa más para acabar con cientos de animales. Lo hemos visto con los indios (que como los animales eran vistos como algo inferior), con los lobos, con los osos, con los conejos... y con cientos de especies de animales. Aquí solo se toma conciencia (si es que lo podemos llamar así) cuando ya se esta al borde de la extinción. Y lo que es más (algo que has comentado) no se debate en torno al genocidio animal que se esta haciendo recluyendo a estos animales a espacios cada más pequeños acosados a través de carreteras, urbanizaciones, turistas, industrias...etc. Los animales que necesitan de grandes extensiones para sobrevivir están cada vez más copados y algunos como los osos grizzly de los EEUU están comiendo de vertederos. Pero ojo que se produzca un solo ataque de uno de estos a un ser humano, como siempre por un solo ataque a personas o a cultivos morirán cientos de ellos de manera legal y si nos ponemos a contar ya las ilegalidades furtivas o las atrocidades genéticas con venenos flipariamos. Algunos creen que creando más parques naturales el problema estaría resuelto pero eso solo es parte del problema debido a que en ellos no se puede hacer nada y la mano del hombre (y no la del mercado y la del capital) podría hacer cosas muy buenas en la naturaleza como ya las ha hecho en el pasado. Mirar Doñana que esta protegido y tiene problemas ecológicos. Alli quieren hacer un trasvase porque no tienen agua. Todo muy sostenible y muy ecológico compañero