“No soy verdaderamente libre más que cuando todos los seres humanos que me rodean, hombres y mujeres, son igualmente libres”.
Mijaíl Bakunin.
Estos días pasados pude ver el documental La teoría sueca del amor [1] , el cual nos muestra hasta donde ha llegado la sociedad sueca después de que el gobierno socialdemócrata de Olof Palme pusiera en práctica el manifiesto político "La familia del futuro: una política socialista para la familia", en 1972. Dicho manifiesto centra su arsenal en la liberalización de la persona del común, es decir la atomización del individuo. Se legisló para conseguir la autosuficiencia de las personas en la realización de su propia vida, sin necesidad del otro, ni del contacto con sus vecinos, familiares o pareja. Además esta política trataba de liberar a los hijos de los padres, la mujer de su marido... para satisfacer su vida , para realizar sus hábitos diarios. Es la eliminación de las conexiones tradicionales, familiares y amistosas entre las personas. Al mismo tiempo, dicha ley delegó la gestión total de los medios de producción y los servicios por parte del Estado, que se hacía dueño omnipresente de la totalidad.
Pretender escribir unas líneas sobre la individualidad del individuo ha sido porque creo que esta película sirve de pretexto para hablar de los fundamentos de la vida en comunidad. La riqueza está en interaccionar entre todos mediante el "apoyo mutuo" para alcanzar la plenitud mediante la vida comunitaria. Pero a parte de esto, nos abre un debate interesante al comparar esta individualidad nociva con el refuerzo positivo de la individualidad que ha difundido el anarquismo a lo largo de la historia. No se puede delegar en otros las decisiones de tus acciones y de ahí la importancia del individuo en los entes colectivos. Como sabemos una parte del pensamiento radical, siempre ha defendido cierto individualismo necesario para aportar y ser útil en la vida colectiva y también es interesante esta perspectiva que jamás puede ser extrapolada al individualismo atomizante que el documental nos muestra.
Al mismo tiempo el documental nos muestra aspectos fundamentales de Suecia, que se ha convertido en "ejemplo" europeista donde se encuentra el mejor bienestar para el desarrollo de la vida [2], aunque nuestras dudas sobre estas divagaciones son evidentes. A la vuelta de más de cuatro décadas de la puesta en práctica "la familia del futuro" vemos que en Suecia el aburrimiento ha llegado a tal grado que es la primera causa de muerte, por lo que se ha convertido en una autentica epidemia.
Un 25% de las personas que mueren vivían solas en el domicilio, ya que han perdido las relaciones con sus congéneres. El cadáver es hallado, en ocasiones, después de varios meses del fallecimiento, sin que nadie eche en falta al difunto. Este vacío social es suplido por el Estado, que tiene un servicio para al ciudadano que trata de localizar a la familia del difunto para que se haga cargo del cuerpo.
La familia del futuro ha degenerado en una sociedad vinculada a la soledad y el aburrimiento. A esto intentan darle remedio con un aumento exponencial del consumo de ansiolíticos y prozac. Como si de juegos se tratase, el documental nos muestra como grupos de personas quedan para buscar la felicidad al relacionarse entre ellas. Cosas que realizaría la sociedad en sí, son sustituidas por un simulacro social forzado. Una de estas actividades más impactantes son las quedadas para hacer un recorrido peinando una zona con el fin de encontrar otras personas que se perdieron o están desaparecidas El monitor de la actividad recuerda, que se debe de tener cuidado con los participantes, ya que alguno puede perderse y tendrá que ser buscado en próximas actividades.
El individuo hoy en día tiene sus relaciones estando conectado a cachivaches y satisface su felicidad con el consumo de productos suministrados por la industria de la publicidad, no de la utilidad. También hace un repaso el documental por el modelo de la procreación sexual, sin contacto y por Internet. Esto ha provocado que las familias mono-parentales sea lo normal en Suecia. La fémina que desea ser madre, pide el semen por internet en una amplia base de donantes, el cual le llega por correo a su domicilio y ella se lo fecunda. Los hombres donadores del semen dicen “hace un favor al darlo y ayudar a ellas a ser madres”. La voz en off nos hace una pregunta sin repuesta ¿Dónde estará el hombre en el futuro? Y yo me pregunto ¿y la mujer? ¿Y el niño al llegar a su juventud?...
Nos muestran donde puede existir un futuro negocio en la escena que sale el representante del banco de semen. La creación de una aplicación o programa informático para que lo utilice la fémina en el momento de la fecundación para que sea al 100% segura, utilizando unas gafas donde ella ve escenas muy tiernas y amorosas, recreando lo que sería una situación placentera.
Hay una escena que me llamo la atención, es una conversación entre dos inmigrantes, dicen:
- ¿Dónde están los suecos?
- No sé, yo nunca he visto a un sueco.
Alfonso Soler. Colaborador de El Eco del Palancia
[1] http://www.filmaffinity.com/es/film798697.html
[2] http://www.lavanguardia.com/vida/20170225/42249501241/sabado-de-mapas-better-life-index-bienestar-oc
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