Aprovechamientos de montes comunales en Segorbe y comarca.

A continuación quiero plasmar unos aspectos que desde hace algún tiempo suscitan interés en mucha gente pero que por falta de información sobre ellos, están muy poco presentes en el ideario individual y colectivo, me refiero a los aprovechamientos comunales.

No es mi intención entrar a valorar la situación del Antiguo Régimen, entre otras porque no conozco la situación lo suficiente, pero como ya se ha introducido levemente desde este espacio y algunos textos, fueron precisamente las progresivas desamortizaciones y medidas liberales (antecesoras en muchos aspectos de nuestro actual sistema) las encargadas de que numerosos campesinos no pudieran acceder a la tierra, al adquirir esta un valor monetario del que evidentemente no disponían, con excusa de emancipación; y es que en realidad tuvieron unas consecuencias nefastas para el pueblo que no pudo acceder a la compra de los bienes desamortizados, siendo beneficiados la oligarquía burguesa, militar y terrateniente, haciendo ya de la propiedad privada un hecho cotidiano que radica en este origen y que llevó a numerosos grupos campesinos a observar estas medidas como enemigas, pues no hay que olvidar que, entre otras, también fueron las encargadas de asentar el valor del dinero en sus vidas. Imposibilitados a pagar los arriendos e impuestos mediante este todavía se empobrecieron más. Por tanto la situación de “hambre de tierras” continuó incluso hasta después de la Reforma Agraria republicana, de consecuencias similares al no expropiar lo que se tenía previsto.

En cualquier caso, lo más recurrente es que dicha expropiación no se limitó simplemente a las órdenes religiosas, que suelen ser las más recalcadas, sino que salpicó a las propiedades (montes, molinos, almáceras, hornos, etc.) pertenecientes a los habitantes del lugar, como expone el documento de J. Faus y Faus Páginas de la historia de Segorbe, 1850-1900, al contar dichos aprovechamientos para esta localidad, algunos de los cuales beneficiaban también a las poblaciones vecinas de Altura, Jérica o Navajas, y principalmente por lo que se refiere al suministro de leña y al abastecimiento de pastos. Y ya no solo por lo que en términos de autosuficiencia comprende en contraposición a la economía de mercado, sino por el valor moral que esto implica, traducido en cuanto a ayuda mutua, intercambio recíproco y mantenimiento de los lazos familiares y comunitarios, de ahí que en El Toro todavía se recuerde a la orden religiosa de los Jerónimos, quienes amos y dueños del lugar, como bien manifiestan y no tratan de esconder, supieron, por otra parte, dejar para los vecinos aprovechamientos comunales como los pastos, leñas, moliendas, y comerciar con carnes, lanas y vinos; o a las Sociedades de Montes que, a consecuencia de ello, se crearon en algunas localidades con el fin de comprar al Estado los montes comunales desamortizados.

Pues bien, los principales montes a los que hace referencia el documento son: Monte Mayor, La Jabonera, Pico del Águila, Loma del Gordo, Peñablanca, Collado del sastre, Hontanar, Coscojosa, Romeral, Caída de la zarza y Malo.

Presentamos ahora pues la relación de dichos montes y la actividad que en cada uno de ellos acontecía, así como un artículo referente a su venta.

Esperamos como mínimo dejar constancia de ello.

Thymus vulgaris